A L A M E M O R I A D E U N A M I G O
A través del comentario de un amigo, me ha sobrevenido la idea de honrar la memoria de una persona que llevo siempre conmigo, y a la cual recuerdo con nostalgia y un enorme cariño. Nos dejó hace mucho tiempo, pero sigue tan viva en mí, tan presente, que parece que de un momento a otro voy a ir a buscarle, o él va a salir a mi encuentro.
La injusticia de la vida, quiso que nos lo arrebataran. Tenia treinta y pocos años...y una entereza enorme. Sufrió sólo. No compartió con nadie sus penas, su enfermedad, su tristeza. El era de compartir alegrías, que transmitia, con su sola presencia.Estoy escribiendo y no puedo evitar escuchar su voz, sus risas.
Lo único grato que me queda, es que pudimos despedirnos; sin palabras, sin lagrimas, sólo un abrazo inevitable e interminable, y una última mirada de complicidad marcó el : "¡Hasta siempre!". En aquel momento comprendí que marchaba a un exilio interminable.
Jamás te olvidaremos, ni yo, ni nadie de los que tuvimos la suerte de compartir contigo tantos momentos, tantas vivencias, no todas buenas, pero si, inolvidables.
Seguro que donde quiera que te halles, habras sabido rodearte de nuevas amistades.
¡¡Hasta siempre, amigo!!
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