sábado, 11 de junio de 2016

¡Y QUE CUMPLAS....TODOS LOS QUE QUIERAS!



                                ¡ Y QUE CUMPLAS......TODOS LOS QUE QUIERAS!
                         
              Transcurrió mayo, mes de las flores, de cruces, de romerías, de cohetes al cielo, de fiesta de
              los patios en Córdoba, donde estos muestran al mundo, como ellos sólo saben hacerlo, las
              bondades de los geranios, de las gitanillas, de las rosas, de los claveles......,de cada maceta
              que cuelga de sus balcones y paredes, mostrando todo su esplendor, acompañadas por la
              melodía incesante del agua de sus fuentes.
              Y entre los susurros de los últimos cantes de los más trasnochadores, asomó junio, y con él,
              esa fecha, que teníamos a buen seguro, marcada de rojo en el calendario: el primer fin de se-
              mana del recién estrenado mes.
              Y allí, entre el Guadalquivir y Sierra Morena, nos esperaba, en la Qurtuba de los califas, la
               "sultana" de nuestros encuentros, la que ha hecho posible, que en menos de un año, vol-
               vamos a reunirnos de nuevo, los amigos de la infancia, los de "toda la vida", y que no ten-
               go la menor duda, de que lo seremos por y para siempre.
               Emotividad a raudales, la surgida una vez más, con reparto de largos abrazos, con mira-
               das que expresan, lo que en ese momento no somos capaces de decir con palabras. Es
               el anhelo inevitable de querer recuperar un tiempo, que se nos antoja, perdido. Fin que
               logramos, y en unas horas, unos días, somos capaces de abrir el paréntesis de nuestras
               vidas, que nos ha tenido involuntariamente separados. Ojala, no se cierre nunca más.
               Lo que comenzó como tu cumpleaños, al final, terminó en aniversario de amistad de
               todos los presentes. ¿Se puede tener mejor regalo?
               Gracias amiga. Un abrazo ( otro más ), que quiero compartir contigo, y con todos los que
                tuvimos la fortuna de compartir unos días tan especiales para ti, y que se han tornado
                inolvidables, para todos los que lo disfrutamos contigo.
                Con la torpeza de mis palabras, sólo me resta decir, que por tu actitud, eres merecedora
                de cumplir todos los que quieras......, ¡Hasta siempre, sultana!